Una inusual entrega de los maravillosos Cuentos de Polidoro (escrito por el gran Horacio Clemente), donde el Maestro Napoleón en lugar de utilizar su característico explosivo Technicolor, optó por dejar a los personajes en blanco y negro. Los fondos, a su vez, son una mezcla de color y collage, algo también poco habitual, casi como si asistiéramos entre una fusión del estilo de Napo y Ayax Barnes. La decisión puede haber obedecido a audacia y experimentación, aunque no se descarta que tal vez haya tenido poco tiempo y dicho "ma sí,lo resuelvo así". De cualquier modo, un placer para los ojos como siempre.
("El Caballo Volador", Centro Editor de América latina, 1967, un excelente año)